DOI: 10.19137/anclajes-2017-2116
RESEÑAS
La obra de Guillermo Cabrera Infante
fue muy leída en América Latina.
Los gestos propios de una prosa neobarroca,
permeada por técnicas narrativas
deudoras de los avances cinematográficos
y de los desarrollos de las artes visuales, la
fotografía y la música, ubicaron sus novelas
y ensayos en un centro de irradiación
que concita todavía la atención del público
especializado y de lectores entusiastas. La
reciente traducción al español del riguroso
estudio de Claudia Hammerschmidt, publicado
originalmente en alemán (“Mi genio
es un enano llamado Walter Ego”. Strategien
von Autorschaft bei Guillermo Cabrera
Infante, 2002), realiza un aporte valioso en
la amplia bibliografía existente ya que establece
un diálogo lúcido y erudito con la
vasta producción crítica sobre la obra del
cubano. A partir de la tesis doctoral presentada
en la Universidad de Colonia, la
actual profesora de la Universidad de Jena
presenta una investigación centrada en los
procedimientos de deconstrucción de la figura
de autor y sus persistentes inscripciones
inter e intratextuales en la producción
ficcional de Cabrera Infante. La hipótesis
de que ninguno de sus textos es definitivo,
sino que el autor incide en su continua reescritura
y los somete a revisiones, incluso
después de su publicación, orienta el estudio
de los vínculos entre el agotamiento referencial
del lenguaje y la aparente pérdida
de poder del autor sobre lo escrito.
En la primera parte, “Tres tristes tigres
o el vaciamiento de la lengua”, se explora
en detalle la oscilación de la novela entre
su figuración como relato ficcional y la reiterada
inserción del autor en el texto. Esta
estrategia, en apariencia contradictoria,
acerca el mundo referencial evocado por
y pone en evidencia que el escepticismo lingüístico de Cabrera Infante encubre, en realidad, la inquietante constatación de que el lenguaje va más allá de la existencia del autor. Las constantes inscripciones de su nombre y la reescritura continua de sus textos son los procedimientos más visibles de un proceso de corrosión y, al mismo tiempo, puesta en valor de la apropiación lingüística del mundo. El análisis de esta paradoja se organiza en tres partes estrechamente vinculadas: “La ausencia del inicio”, “La mentira” y “Sobre la traducción”. En las tres se realiza un análisis exhaustivo y bien documentado de las claves de escritura de Tres tristes tigres y sus múltiples reescrituras como traducción, parodia, recuerdo y escritura retrospectiva, entre otras técnicas narrativas. A partir de un marco teórico eficaz que conjuga fuentes tan relevantes como las teorías sobre la lengua y la ficción de Platón, Friedrich Nietzsche, Walter Benjamin, Roland Barthes, Paul de Man, Jean-Luc Nancy o Jacques Derrida, se plantean los límites miméticos del lenguaje y se abordan en detalle las estrategias retóricas de distanciamiento referencial, desplazamiento y reescritura autoficcional puestas en juego en esta novela y en la obra general del autor.
Un “Intermezzo: retrospectiva prospectiva” actúa como umbral para lo que sigue. En breves páginas, se enmarcan en el proyecto creador de Cabrera Infante las estrategias analizadas en la primera parte y se devela la tesis general de la investigación: Tres tristes tigres se mueve como un texto híbrido entre el quiebre moderno del mundo y el lenguaje y la celebración posmoderna del lenguaje por sí mismo. En razón de esta hibridez, la fractura radical con las formas miméticas que se observa en la novela no conduciría a una imposibilidad referencial, sino a una nueva forma de mímesis en la que las infinitas referencias intratextuales se autentifican por la continua presencia de la figura de autor.
En la segunda parte, “La reapropiación retrospectiva, o la escenificación de la remotivación”, se avanza, con una estrategia especular, sobre los argumentos planteados en la primera parte del libro. El subtítulo del apartado, “Sobre la traducción”, devela esta estrategia organizativa que disecciona los distintos componentes y funciones de la figura de autor en sus múltiples traducciones: el nombre, el seudónimo, la firma, la reduplicación, la reescritura, etc. En uno y otro movimiento de traducción se advierte cómo el autor imita, con sus entradas y salidas de los textos y del proyecto general de su obra, el doble movimiento de llegada y partida del lenguaje y del proceso de escritura.
Por último, un epílogo sobre Mercator y los juegos de palabras de Cabrera Infante con su nombre cierra el volumen a la vez que ofrece una proyección simbólica de las ideas generales del libro hacia nuevos escenarios lingüísticos y literarios.
En síntesis, la publicación del estudio de Claudia Hammerschmidt en español es una encomiable iniciativa que suma profundidad y erudición a la compulsa crítica de uno de los corpus ficcionales más innovadores y disruptivos de América Latina. Su difusión contribuye, además, al acercamiento entre el campo académico alemán y la producción teórica de las universidades latinoamericanas en un momento en que la circulación transnacional del conocimiento se impone como un reto ineludible.
Graciela Salto
Universidad Nacional de La Pampa
Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas, CONICET